Los beneficios de los perfiles de acero comerciales se ven reflejados en su desempeño, ya que al ser perfiles de un tamaño más reducido, son hechos utilizando menos material que un perfil estructural, lo que ocasiona que en este caso, los productos de esta gama sean más ligeros y su precio sea más accesible, dando lugar a que se disponga de una mayor cantidad de ellos, misma que es aprovechada en diferentes áreas, incluso para complementar los armados de acero, que sirven como base o una especie de esqueleto metálico para la obra.

Como característica añadida, todos estos productos cuentan con una certificación del acero por parte de la ASTM, organismo internacional que se encarga de certificar a los productos para su uso apto en ciertas estructuras. Esto garantiza que la seguridad de los trabajadores, así como del personal que posteriormente se instale en el edificio cuando las obras terminen, se encontrará a salvo de cualquier incidente relacionado con una falla en la estructura, pues los materiales son confiables y resistentes, por lo que no existirán problemas de este tipo.

Las cualidades de estos materiales tienen como ventaja que son flexibles si su composición es sencilla y no se encuentra unida en algún punto, mientras que los elementos comerciales que forman alguna figura geométrica son menos flexibles, pero más sólidos, mientras que los productos más sencillos, cuya estructura de fábrica es recta y no tienen elementos que refuercen su cuerpo, son más flexibles, lo que los habilita para participar en secciones como parte de un soporte o elemento auxiliar para garantizar la estabilidad de un producto.