La lámina de acero acanalada consta de un producto que fue sometido a un proceso de laminado en caliente en donde adquiere su forma plana, posteriormente pasa a un proceso de laminado en frío, en donde adquiere su forma de lámina al pasar por una serie de rodillos en donde se le da el acabado acanalado que se desea, el cual puede ser más definido, ondulado o puede contar con características que le ayuden a ser un producto engargolado. En cualquiera que sea el caso, se les recubre con zinc para que estén protegidas, sin importar su forma final.

Los beneficios de la lámina de acero galvanizada acanalada se dan en diferentes aspectos, dado que su uso determina el tipo de ventaja que provee. Por ejemplo, cuando se le usa como parte de un techado, la cubierta acanalada sirve para mejorar la afluencia pluvial, por lo que se evita que existan charcos en la superficie del producto, así cómo también mejora ligeramente la estética del sitio, y no permite que haya un impacto tan fuerte del viento en el techo si se le coloca de la forma adecuada, por lo que si el viento no golpea directamente cuando la lámina está de forma horizontal.

Otro de los aspectos positivos que aportan las láminas acanaladas es que son muy económicas, por lo que se pueden adquirir en grandes cantidades sin que el presupuesto de una obra aumente considerablemente. Por ello también se decide utilizar a este material como parte de los múltiples muros que puedan existir, pues es ligera y tiene una resistencia física sin igual. El galvanizado sobre su cubierta le aporta más fuerza simplemente evitando que el acanalado sea vulnerado cuando el acero interactúa con agua o con químicos corrosivos.